La necesidad de contar con un Plan Estratégico Apícola 2030 (PEA) resulta indispensable para mirar los próximos años y trazar los ejes centrales de la actividad, continuar con el desarrollo en las distintas regiones de nuestro país y así promover la mejora de la calidad de vida de las personas y comunidades involucradas.

A la luz de la situación y proyección actual, y entendiendo que la utilidad del mismo está estrechamente relacionada a la participación de la mayor cantidad de actores de la cadena productiva, la cartera Agroindustrial estableció dos instancias de participación en la actualización del Plan Estratégico Apícola 2030:

-La consulta online: donde se espera conocer la opinión personal de los integrantes del sector. Acceda desde aquí.
-Los talleres regionales: es para conocer el panorama de cada región del país a través de los representantes de sus Instituciones/Organizaciones de la cadena apícola.

El primero de los talleres se realizó en el NOA los días 31 de mayo y 1 de junio en San Miguel de Tucumán, en el cual participaron representantes del sector público y privado de Salta, Jujuy, Catamarca, La Rioja, Tucumán y Santiago del Estero.

Los resultados de esta consulta y los de los talleres regionales definirán el diseño de las propuestas de políticas para la cadena en los próximos años.

La apicultura es sinónimo de arraigo, desarrollo territorial, fuente de divisas y empleo, además de ser una actividad complementaria y sinérgica de otras producciones agropecuarias para la producción de alimentos.

En el primer trimestre de 2018 se exportaron 21.358 toneladas de miel por un monto cercano a los 33 millones de dólares, y un valor promedio de venta de 2.612 US$/T, obteniendo un crecimiento del 18% respecto del mismo periodo del año anterior.

Los antecedentes

En el año 2006, representantes de la actividad apícola trabajaron para contar con un plan estratégico con vistas a 2017. El mismo buscaba marcar un rumbo consensuado en la actividad, diseñar políticas públicas de apoyo al desarrollo del sector.

El Plan elaborado en forma participativa entró en vigencia sin la fuerza necesaria para hacer visibles los objetivos perseguidos. Hoy resulta indispensable su actualización para mirar los próximos años y trazar los ejes centrales de la actividad. Así lo entendió el Consejo Nacional Apícola, que acordó en su primera reunión plenaria del mes de marzo de este año impulsar su actualización.

La construcción participativa del Plan Estratégico Argentina Apícola 2030 (PEA 2030) es la oportunidad de reflexionar sobre dónde estamos en esta actividad, a dónde queremos llegar, qué necesitamos para hacerlo y de qué manera cada uno de los actores del sector contribuye a alcanzar la meta.