Jornada de formación sobre espacios culturales sustentables
El sábado 24 de septiembre se realizó una jornada de formación sobre ambientalismo de la que participaron gestores culturales de la zona sur de la provincia de Buenos Aires.
¿Cómo lograr espacios culturales más sustentables? fue la pregunta que guio el encuentro de formación que organizó el Ministerio de Cultura -a través de la Secretaría de Gestión Cultural- junto con el Ministerio de Ambiente de la Provincia de Buenos Aires y el Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires el 24 de septiembre pasado. Se trató de una jornada de formación para espacios culturales de la zona sur de la provincia de Buenos Aires en la se abordaron temáticas fundamentales para pensar esos espacios: la transición ecológica, la educación y la cultura ambientales, y la comunicación desde un enfoque circular. Además, se relevaron las agendas particulares de los espacios culturales en relación al ambiente. De la jornada participaron referentes de espacios culturales de la zona.
En el encuentro se abordó el ambientalismo desde una perspectiva popular, a partir de una relación indisociable entre la naturaleza y la cultura; con una mirada que piensa a los fenómenos químicos y físicos, a la fauna, la flora, la tierra y el agua en una relación estrecha con la vida de las personas y su forma de organización social. Desde esta perspectiva, se explicó que la crisis ambiental actual es en realidad una crisis civilizatoria que tiene que ver con un modelo de vida que pone en peligro a los seres humanos y a los ecosistemas. “El ambientalismo popular lo que viene a reconocer es que los mayores problemas ambientales son la desigualdad y la pobreza. Pensar las problemáticas ambientales implica, entonces, pensar nuevas formas de producción, nuevas formas de redistribuir la riqueza, nuevas maneras de vincularnos con nuestros bienes comunes materiales”, explicó María Murillo, integrante del equipo de la Dirección de Educación Ambiental del Ministerio de Ambiente de la provincia de Buenos Aires. Murillo brindó un taller de educación ambiental en el territorio, junto a Guadalupe López, Directora de Educación Ambiental en el Ministerio de Ambiente de la provincia de Buenos Aires.
En esta línea, en los talleres y conversatorios se promovieron prácticas sustentables no solo para cuidar el medioambiente sino también para repensarnos como sociedad. “Cuando decimos que los mayores problemas ambientales son la desigualdad y la pobreza, estamos hablando de un modelo de producción que los provoca y que tiende a producir un creciente individualismo y a diluir el lazo social”, dijo Murillo. Al tiempo que agregó: “Los espacios culturales tienen la posibilidad maravillosa de reconocer el lugar en el que están situados y desde ahí traccionar acciones para hacer una vida mejor para las personas. Más allá de ejercer prácticas de separación de residuos, de compostaje o dar soluciones a problemáticas ambientales concretas el centro cultural es un espacio para construir comunidad y eso ya es empezar a ganar una batalla”.
“El centro cultural viene a contar algo del ambiente en el que vivimos, de aquello que nos hace ser quiénes somos, de aquellas características que se expresan en nuestra identidad y lo ambiental no le escapa a eso. Por eso los espacios culturales tienen mucho para decir en términos de prácticas sustentables y como espacios para encontrarnos con los demás e intentar modos de vivir que sean dignos, sustentables y sostenibles en el tiempo”, definió Murillo.
Por otra parte Emanuel Rolón del Espacio Cultural Bienteveo, de Presidente Perón, señaló: "Antes de este encuentro de formación pensaba que el fortalecimiento de una conciencia ambiental se daba únicamente en espacios verdes, huertas o parques y creía que los espacios culturales estábamos limitados para intervenir en los problemas ambientales. Gracias al espacio de formación “Espacios Culturales Sustentables” entendí la revalorización que el Estado le da a los espacios culturales como un engranaje más para repensar políticas e intervenir sobre los problemas estructurales. Con estas herramientas todos podremos trabajar en nuestros territorios para generar propuestas innovadoras, situadas e integrales que vehiculizan la participación social sobre las cuestiones ecológicas y ambientales promoviendo así el desarrollo sano y sostenible de nuestras comunidades".