La reunión del Grupo de Trabajo Anticorrupción ampliado, que está integrado por la Cámara de Comercio e Industria (AHK) Paraguayo-Alemana, tuvo como objetivo dialogar sobre los programas de incentivos de integridad en América Latina y su impacto. En ese marco, el Subsecretario de la Dirección de Planificación de Políticas de Transparencia de la Oficina Anticorrupción (OA), Luis Villanueva se refirió a la creación del Registro de Integridad y Transparencia para Empresas y entidades (RITE). Explicó que, luego de la sanción de la Ley de Responsabilidad Penal de las Personas Jurídicas, la OA buscó “el aspecto más propositivo, que implique un trabajo en prevención de la corrupción para que los casos no sucedan”.

En ese contexto, retomando la experiencia de México en la materia, se trabajó en un proyecto de elaboración colectiva del RITE. Este registro “es una plataforma donde las empresas muestran en una vidriera lo mejor que tienen en integridad”, dijo Villanueva. Además, la información volcada en la plataforma es abierta, fomentando así la colaboración entre empresas. Por otro lado, el RITE contendrá información sobre debida diligencia y funcionará además como una plataforma formativa. “Esto se pensó como una iniciativa colectiva. La virtud es haber sentado a todos desde el principio. Creemos que hay un valor ahí”, sostuvo.

Villanueva recordó que desde la OA se viene impulsando la creación de áreas de integridad en todas las dependencias de la Administración Pública Nacional. Finalmente, destacó la necesidad de profundizar lazos de colaboración entre los países de la región. “Estos espacios tienen un gran valor por eso. Aprovechar aciertos y experiencias de cada lado para sacar lo mejor posible”.

Del mismo modo, Dálida Acosta, responsable del Padrón de Integridad Empresarial de México, explicó que el programa de incentivos fue lanzado en 2019 y que ya se está implementando tiene como objetivo “fomentar la cultura de la integridad, la ética, la honestidad y el respeto mediante la integración voluntaria a este registro” que “busca además una corresponsabilidad entre el gobierno y el sector empresarial”. Acosta también destacó que “los incentivos que se ofrecen con este padrón es el distintivo en materia de integridad, buscamos generar la confianza en la interacción entre empresas y gobierno”.

A continuación, Keyne Taniguchi, Coordinador General de Integridad Privada de Brasil, se refirió a Empresa Pro-Ética, el programa de integridad para el sector privado brasilero que funciona hace 10 años. El funcionario comentó que en el inicio tuvieron que “concientizar a las empresas que tenían responsabilidad en tener buenas prácticas”. Explicó además que, a partir de la Ley Anticorrupción, las empresas que tienen programas de integridad pueden ver reducida la multa en caso de recibir sanciones.

Más adelante, se realizó la presentación de una de las acciones del Proyecto de Cooperación Trilateral referente a la implementación de un programa de incentivos en Paraguay con el apoyo y la experiencia de programas similares ya existentes en Brasil y la región.

El Programa de Incentivos de Paraguay se implementará con base en normas de integridad en empresas del sector público y privado, con énfasis en empresas proveedoras de materiales y servicios para el Estado paraguayo.

Por último, Carolina Echevarría, moderadora del evento, destacó que “el espíritu de los programas de funcionar como promotores de programas de integridad pero también darle contenidos y las alianzas con otros actores para que sea también una herramienta de aprendizaje, es un valor agregado a lo que es el trabajo de programas de incentivos”.