Gendarmería logró detener a varios efectivos policiales  de la Policía de San Juan, de la Dirección Judicial, la División de Drogas Ilegales y la Comisaría N° 4, acusados de proteger a bandas narcotraficantes, liberar zonas para que operen con tranquilidad y entorpecer averiguaciones.

La investigación, que se encontraba en curso gracias a las pesquisas realizadas por el personal de la Gendarmería Nacional junto con los efectivos del Centro de Reunión de Información San Juan, derivó en varios allanamientos y detenciones de los efectivos sospechados gracias a la intervención judicial del Juzgado Federal de San Juan N° 2.

De esta manera, se llevaron a cabo ocho allanamientos simultáneos en la Central de Policía de San Juan, el Departamento de Drogas Ilegales, la Comisaría N° 4 y los domicilios particulares en donde residirían el Comisario General, un Oficial Principal, un Cabo Primero y tres civiles. Paralelamente se libraron las correspondientes órdenes de detención sobre los susodichos para lograr capturar a todos los involucrados en el delito y se decomisaron ocho vehículos, los cuales eran utilizados para concretar las reuniones y entregar las sustancias ilícitas

Las investigaciones que llevó adelante la Gendarmería, cruzando llamadas y trabajando en el campo de la acción, permitieron desarticular un negocio que afectaba directamente a los jóvenes sanjuaninos.

Hay una decisión política de correr a las malas espinas que ensucian la buena labor de las policías. Son muchos los hombres y mujeres que arriesgan su vida para protegerlos de la inseguridad, y no vamos a tolerar que unos pocos se lleven por delante a las instituciones.