El primero de ellos, ocurrió durante un control vial cuando los gendarmes detuvieron a un motociclista oriundo de Mendoza, quien intentó evadir el dispositivo de seguridad. Al proceder con la inspección, los agentes advirtieron que el individuo presentaba un bulto sospechoso en la zona del abdomen y realizaron un pasaje con el can detector de narcóticos “Benzo”.

En presencia de testigos, los funcionarios confirmaron que el mendocino transportaba, adosado a su cuerpo, un paquete envuelto con una faja el cual contenía 1 kilo 96 gramos de cocaína.

El segundo procedimiento, llevado a cabo en el Paraje San Carlos, el personal de la misma Unidad junto con el binomio cinotécnico, controlaron un automóvil ocupado por un hombre mayor de edad.

El can alertó sobre la posible presencia de estupefacientes en el interior del rodado, y al profundizar la requisa se halló un ladrillo con un peso total de 1 kilo 599 gramos de cocaína.

En ambos casos, intervino el Fiscal General de San Juan, Dr. José Francisco Maldonado.