El procedimiento tuvo lugar en el camino que conduce al paraje San Pedrito cuando efectivos de Gendarmería Nacional realizaban controles vehiculares en la zona. Al observar que dos motocicletas provenientes de Bolivia se aproximaban al puesto intentaron detener su marcha pero los conductores hicieron caso omiso y se dieron a la fuga.

Durante la huida y mientras intentaban hacer maniobras evasivas, los ocupantes perdieron el control de las motos, por lo que abandonaron las mismas y huyeron a pie por una zona de montes. A su paso arrojaron tres mochilas y dispararon indiscriminadamente con armas de fuego contra los uniformados.

Al inspeccionar las mochilas abandonadas se hallaron 48 paquetes con 50,207 kilos de cocaína. A su vez, en otro de los bolsos se encontró una pistola calibre 9 mm., un equipo de comunicaciones y documentación de interés.

Este tipo de operativos demuestran que la operatividad de las fuerzas federales en las fronteras no sólo está intacta, sino que cada día avanzamos un poco más en la lucha para una Argentina sin narcotráfico.