Luego que Gendarmería Nacional identificara un vuelo irregular (TAI) en cercanías de la localidad santiagueña de Los Pirpintos, se desplegaron patrullas sobre la ruta 16 y un equipo especial efectuó un seguimiento desde un helicóptero.

Al verse descubierto, el aeroplano sospechoso comenzó a arrojar bultos en una zona de Monte Quemado. Allí, los efectivos detectaron que se había acercado una camioneta, ocupada por dos personas. Estos intentaron alzarse con los bultos, pero fueron detenidos, mientras que la avioneta retomó altura rápidamente y no pudo ser alcanzada.

Al abrir las bolsas que se habían arrojado, los gendarmes hallaron 9 paquetes con 300 kg de cocaína. Mientras que en la camioneta secuestrada los efectivos encontraron equipos para marcar zonas de aterrizajes nocturnos y un teléfono satelital.

En un rastrillaje de la zona se encontró una casa rodante sin ocupantes. Al requisarla se hallaron 44 bolsas similares a las anteriores, totalizando 51 bultos con 1.838,895 kg de cocaína repartidos en ladrillos de diferentes medidas.