"Frutillas del Viento" amplía sus fronteras
Entre el 16 y el 18 de abril se realizaron charlas de difusión de las actividades de "Frutillas del Viento" en Trevelin, Corcovado, Esquel y Paso del Sapo. La posibilidad de producir frutillas con riego generado por energía limpia sigue generando adeptos en Chubut. En esta oportunidad participaron más de ochenta personas entre estudiantes, productores y público en general.
El Proyecto “Frutillas del Viento” llevado adelante desde hace cuatro años por la Fundación 500RPM y el INTA Esquel consiste en el uso de energías renovables para almacenar y bombear el agua para el riego por goteo del cultivo en micro túneles. Con exitosas experiencias en parajes de la meseta del Chubut, el proyecto amplía horizontes, suma grupos de trabajo y espacios de producción.
En esta oportunidad, llevaron adelante diferentes charlas de difusión del proyecto. El primer lugar fue la Escuela Agrotécnica N°740 de Trevelin donde ya se viene trabajando con estudiantes en la construcción de aerogeneradores como parte de la currícula escolar.
Guillermo Pleitavino, parte de la Fundación, Sociólogo y responsable de la formulación de proyectos y Comunicación, junto a Eduardo Miserendino de INTA Esquel llevaron adelante las charlas.
En Corcovado el encuentro fue en la sede de productores. Pleitavino señaló: "es muy satisfactorio ver que se va contagiando el entusiasmo por esta propuesta. El apoyo de la Unión Europea viene a fortalecer el desarrollo del proyecto y nos permite abrir más puertas para seguir trabajando. Planificamos poder realizar veinticuatro nuevas instalaciones no sólo en zonas cordilleranas, sino también en la costa. A esto se suma el trabajo que vamos a poder articular con gobiernos locales para establecer políticas públicas que contribuyan con este desarrollo, y establecer cuáles serán los insumos necesarios para pensar agendas de transición energética." Y consultado sobre la posibilidad de ampliar la matriz productiva, destacó que "este es un proyecto de innovación. Estamos en constante búsqueda de nuevas tecnologías desde lo energético como desde lo productivo. Comenzamos a trabajar con las frutillas porque entendemos que hay una demanda en el mercado que no alcanza a ser satisfecha, pero no descartamos que en algún momento se pueda utilizar esta tecnología para otros productos."
El proyecto tiene además una veta educativa en la que se capacita a docentes y estudiantes de escuelas técnicas con el objetivo de brindar asistencia técnica para reparar los equipos generadores de energía para riego, lo que históricamente ha sido un gran inconveniente para productores rurales en la región.
Por su parte, Eduardo Miserendino de INTA Esquel, asesor técnico de la iniciativa destacó: "hemos conformado un gran equipo. Tenemos diferentes tareas que van desde relevar las condiciones de los lugares que habita la gente que se inscribe para participar, buscamos establecer que se cumplan las condiciones para llevar adelante el trabajo, la puesta en marcha de la actividad, capacitación y acompañamiento para determinar la instalación de los equipos generadores y posterior seguimiento."
El miércoles 17 se realizó la charla en Esquel, asistieron personas de Cholila, Tecka, Río Percy, Nahuelpan, Esquel, Los Cipreses, Paso de Indios y Trevelin. El jueves 18 se realizó la charla de difusión e introducción a la producción de frutillas en Paso del Sapo, localidad de la meseta chubutense. Participaron asistentes de Paso de Indios y Cerro Cóndor.
Uno de los productores que comienza su trabajo con las frutillas es Simón Marchand, de Cholila. "Nos interesa formar parte de esta iniciativa, lo vemos como una inversión y como una oportunidad para diversificar el trabajo en el campo. En Cholila estamos a doce kilómetros del pueblo, no tenemos energía eléctrica, sólo generadores de energía solar. Pensamos comenzar con unas trescientas plantas y continuar con el acompañamiento del INTA en esta alternativa que nos entusiasma mucho."
También fueron parte del grupo de trabajo Verónica Moreno y Julieta Mulki del Laboratorio de Aceleración del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) quienes tomaron contacto con la Fundación 500RPM para conocer las experiencias con energías renovables en la zona, y con la idea de realizar a futuro contenido de realidad aumentada.
En las próximas semanas se continuará con actividades del proyecto: se instalarán dos sistemas con paneles solares para riego de la producción de frutillas en Paso del Sapo y Taquetrén.