Fiscalización en obras de Córdoba
Inspecciones en el Dique San Roque y el Azud Copacabana.
Durante los días 15 y 16 de octubre del año en curso profesionales de los departamentos de Ingeniería Civil, Electromecánica y Geología de la Regional Cuyo Centro del ORSEP, fiscalizaron el Azud Copacabana y el Dique San Roque en la provincia de Córdoba. En la localidad de Copacabana, departamento de Ischilín, está emplazado el Azud nivelador sobre el río homónimo, construido entre los años 1999 y 2001. Esta obra hidráulica con planta curva está construida en hormigón simple, fundado sobre roca. Posee una altura de 8,65 metros y una longitud de coronamiento de 46,50 metros. Su finalidad es abastecer agua para potabilización y uso consuntivo.
El Dique San Roque, construido entre los años 1939 y 1944, está ubicado en el departamento de Punilla. Forma un embalse de nombre homónimo en cuyas márgenes se han desarrollado importantes centros urbanos. Es una estructura de hormigón tipo gravedad, planta curva, que embalsa 201 hm³ de los tributos hídricos que aportan los ríos San Antonio y Cosquín y los arroyos Los Chorrillos y Las Mojarras, cubriendo un área de 16 km². Entre sus características principales destacan su altura de 45 metros y una longitud de coronamiento de 145 metros. Su principal función es abastecimiento para uso consuntivo, riego, control hídrico y generación hidroeléctrica.
Durante las inspecciones a estas obras, los especialistas del ORSEP fueron acompañados por personal de la Administración Provincial de Recursos Hídricos (APRHI), El grupo de técnicos encabezado por el Ing. Gustavo Rodríguez verificó además la Central Hidroeléctrica San Roque. La misma posee 4 turbinas del tipo Francis con una capacidad de generación de 24 MW. En esta oportunidad el recorrido lo efectuaron acompañados por personal de la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (EPEC), operadora de la Central.
Las tareas técnicas se efectuaron en el marco del convenio entre la Administración Provincial de Recursos Hídricos (APRHI) y el ORSEP, con la finalidad de revisar el estado de las construcciones y el funcionamiento de sus órganos de erogación para posteriormente, tras las consideraciones que se aporten en el informe técnico, efectuar los trabajos necesarios que garanticen el óptimo funcionamiento operativo y la seguridad estructural de las obras.