Filmus inauguró un espacio de investigación en Bahía Blanca y firmó un convenio para la construcción de nuevas obras
Se trata de las instalaciones del Bioterio (Universidad Nacional del Sur-CONICET) con una inversión de más de 30 millones de pesos. Además, se firmó un acuerdo para la ampliación del Instituto de Química del Sur, en el marco del Programa “Construir Ciencia” y se acordó la creación del “Faro de Pampa Azul - Bahía Blanca”, con una inversión de 76 millones de pesos.
El Ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus, viajó a la ciudad de Bahía Blanca, provincia de Buenos Aires, para inaugurar las nuevas instalaciones del Bioterio de la Universidad Nacional del Sur (UNS) – CONICET con una inversión de $30.584.182 pesos. El espacio de evaluación biológica de última generación consta de 250 m2 y fue diseñado de acuerdo a normas internacionales vigentes, desde el cual se fortalecerá el apoyo a las áreas de investigación en biomedicina y se implementarán nuevas capacidades de transferencia de servicios de biotecnología, bromatología y ensayos preclínicos, teniendo en cuenta la seguridad del personal que allí se desempeña.
El Ministro de Ciencia firmó, además, un convenio para la construcción de un nuevo edificio para el Instituto de Química del Sur (INQUISUR) con una inversión de $701.309.993 pesos, en el marco del Programa Federal “Construir Ciencia”. Participaron de la ceremonia y la firma, la Presidenta del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), Ana Franchi; el Rector de la UNS, Daniel Vega; el Subsecretario de Coordinación Institucional del Ministerio de Ciencia, Pablo Nuñez; la Subsecretaria de Federalización de la Ciencia, Tecnología e Innovación, Luz Lardone; y la Directora de CCT-CONICET local, Viviana Echenique.
Durante su disertación, Filmus abordó la cuestión de la universidad modelo, la continuidad de las políticas y el debate sobre el modelo de país. “Empieza a haber una diferenciación entre las universidades que forman profesionales y aquellas que generan conocimiento. La UNS tiene esas dos características: forma profesionales de calidad y al mismo tiempo desarrolla una tarea de investigación científica tecnológica vinculada al territorio”, expresó.
En este sentido, se refirió a la discusión sobre el modelo de país y lo caracterizó en “aquel que le da importancia a la ciencia y la tecnología, a las universidades, y a la investigación o aquel que puede prescindir de esto, y exporte solo productos primarios y se dedique a la especulación financiera” y sobre este último, “la pregunta sería para qué necesita profesionales”.
“Hay que definir si la ciencia y la tecnología es importante o si hay que comprar todo hecho. En algún momento se tuvo que tomar la decisión de que los productos se hacen acá”, y mencionó la exportación por primera vez de radares 3D a Nigeria con tecnología nacional. “Ese es el eje central sino hay que pensar que invertir es bueno solo para los científicos. El trabajo de los científicos/as es para el bienestar del país”, y señaló el desarrollo por primera vez en Argentina de una vacuna.
“Tenemos la obligación de explicarle a la sociedad que la ciencia tiene sentido porque resuelve los problemas de la gente. Si pensamos una sociedad que genere trabajo para su gente, bienestar e igualdad necesitamos la CyT. No hay desarrollo en los países del mundo que no haya utilizado a las universidades y a la CyT como ejes centrales”, indicó Filmus.
Durante el acto, la Presidenta del CONICET Ana Franchi, expresó: “En este nuevo proyecto y en este espacio hay sueños y energía de quienes se mantuvieron persistentes: investigadores e investigadoras, becarios y becarias, personal de apoyo y administrativo. Llegar a este punto no siempre se logra, así que estamos muy felices porque las instituciones se alinearon y porque estuvo el presupuesto. En la Argentina hacemos ciencia de calidad y esto impacta fuertemente en los científicos y científicas y también en las generaciones que están por venir y en la sociedad. Hay un tema muy importante para nosotras y nosotros: las vocaciones científicas, necesitamos más jóvenes que se acerquen la ciencia”.
Franchi hizo hincapié en mantener la continuidad de la inversión en ciencia y en la relevancia de los programas “Construir Ciencia” y “Equipar Ciencia” del Ministerio porque “es fundamental para inspirar y para mantener a nuestros jóvenes en la carrera científica”.
Por su parte, el Subsecretario Nuñez habló sobre los principales desafíos del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación y la dirección a seguir: “Es fundamental ser claros en pedir una continuidad de inversión, para eso se aprobó la Ley de Financiamiento del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación en 2021. Hoy esto nos permite comprar equipos en tiempo y forma, desplegar programas que tengan perspectiva federal y de acuerdo a las necesidades del SNCTI”, y destacó “el esfuerzo del CCT CONICET y la UNS por demandar la ejecución de proyectos y financiamiento como corresponde para lograr impacto. Es un trabajo conjunto”.
Nuñez enumeró tres desafíos por delante: “Lograr una federalización real en Argentina; profundizar la articulación, y profundizar el impacto como SNCTI que mejore las políticas públicas y la calidad de vida de la gente” y por último, afirmó, “no resistimos más desinversión cada cuatro años. Para que Argentina se desarrolle necesitamos diez años más”.
Vega, a su turno, expresó: “Realmente muy significativo e importante este proyecto que pone de manifiesto el gran trabajo en equipo”, y remarcó el equipamiento “que al no tenerlo dificultaba el avance de las investigaciones”. Vega recordó que el proyecto del Bioterio se remonta al año 2009, y que durante esta gestión se permitió avanzar en la construcción.
Más capacidades en Bahía Blanca
La obra del Bioterio, ubicada en el predio Camino La Carrindanga del Centro Científico Tecnológico del CONICET, es el resultado de un esfuerzo conjunto del Departamento de Biología, Bioquímica y Farmacia de la UNS, el Instituto de Investigaciones Bioquímicas de Bahía y el Instituto de Investigaciones Biológicas y Biomédicas del Sur, estos últimos dependientes de la Universidad y el CONICET.
Por su parte, la ampliación del INQUISUR comprende una tercera planta sobre el edificio del instituto y una nueva construcción de tres plantas, que permitirá aumentar la superficie de investigación existente y que el personal pueda desarrollar tareas en un mismo lugar. La obra alcanza los 1700 metros cuadrados que serán financiados con fondos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), a través del programa “Construir Ciencia”.
Cabe destacar, que a través del Programa Federal “Equipar Ciencia”, la UNS y el CONICET Bahía Blanca han sido beneficiados por más de 5 millones de dólares en equipamiento. En su tercer llamado, se adjudicó a la ciudad siete equipos de mediano y gran porte con una inversión superior a 1.800.000 dólares.
Adicionalmente, el Ministro Filmus firmó un convenio para la creación del “Faro de Pampa Azul - Bahía Blanca”, con una inversión por parte de la cartera científica de 76 millones de pesos. Con este faro se busca promover el conocimiento de los recursos naturales marinos, trabajar en la integración de los entornos marinos y costeros, promover la innovación aplicada a entornos marinos, costeros y portuarios, y la inclusión social a través del conocimiento y participación de la sociedad.
Al respecto, el titular de Ciencia dijo: “Poder generar conciencia e investigación es lo que nos da presencia mundial en estos temas. Cuestiones como estas son estratégicas para Bahía Blanca, para el puerto y para la soberanía nacional. Hace muy poco hicimos la primera campaña científica en 10 años a las islas Georgias y mostramos con el INIDEP que teníamos la capacidad de volver a hacer ese tipo de expediciones. No podemos discutir temas como la cuota de pesca en aguas internacionales si no sabemos con qué recursos contamos”.
Y concluyó: “Para nosotros es un orgullo enorme esta iniciativa y que desde el Ministerio la podamos apoyar con la articulación de Pampa Azul con esta política que tenemos mirando al mar”.
Pampa Azul es una iniciativa interministerial del Gobierno Nacional que articula acciones de investigación científica, desarrollo tecnológico e innovación para proporcionar bases científicas a las políticas oceánicas nacionales, incluyendo el fortalecimiento de la soberanía nacional sobre el mar, la conservación, así como el uso sostenible de los bienes marinos, incluida la creación y gestión de áreas marinas protegidas.