“Estudio y monitoreo de agua subterránea en la Cuenca del Río Tunuyán”
Esta semana se dio inicio al proyecto que desarrollan en forma conjunta el Instituto Nacional del Agua (INA) con el Departamento General de Irrigación (DGI) de la provincia de Mendoza en la cuenca del río Tunuyán Inferior.
El convenio firmado tiene como objetivo establecer una red de monitoreo para medir niveles estáticos y calidad de agua del estado actual en los tres niveles de explotación del sistema acuífero. Luego, estos datos permitirán en un futuro cercano identificar zonas y profundidades de mayor afectación del recurso hídrico.
El INA, a través del Centro Regional de Aguas Subterráneas (CRAS), localizado en la Provincia de San Juan y el Centro Regional Andino (CRA), ubicado en la Provincia de Mendoza, debe estudiar, medir e informar sobre el estado cualitativo y cuantitativo del agua subterránea de la subcuenca Río Tunuyán Inferior.
El conocimiento y seguimiento del estado general de las reservas hídricas permite a los organismos técnicos adecuar los programas productivos, a fin de lograr los más óptimos rendimientos, además de prevenir el deterioro de las reservas hídricas, como así también el de los suelos.
La existencia de un monitoreo sostenido en el tiempo, a través de una red de niveles estáticos y de calidad es imprescindible para la correcta gobernanza del agua, debido a que en las zonas áridas los recursos se distribuyen mediante una amplia red de riego, utilización de embalses y explotación de acuíferos.
La cuenca del río Tunuyán está ubicada en el sector norte de la provincia de Mendoza, donde se localiza la subcuenca hidrogeológica Mendoza Norte. Abarca unos 22.000 km². Está conformada por sedimentos clásticos continentales y fluviales transportados que son depositados por los ríos Mendoza y Tunuyán Inferior. Además, la región sureste de la cuenca posee antecedentes de incrementos de salinidad, por lo cual el área de estudio se enfoca particularmente en el espacio comprendido entre estos ríos y alrededores.
La zona se caracteriza por una intensa actividad agrícola, la cual podría haber impactado en la evolución de la calidad del agua subterránea.
Los responsables del proyecto de la Red de Monitoreo por parte del INA son Romina Battistella por el INA-CRAS y Alicia Duek por el INA-CRA, quienes contarán con el apoyo de los/as profesionales y técnicos/as, según su especialidad de ambos centros. Por parte de la DGI estará a cargo Agustín
Speridione, que al mismo tiempo será asistido por personal técnico del organismo.
En esta línea, Battistella destacó el trabajo y la experiencia en redes de monitoreo de agua subterránea realizadas en San Juan por el INA, y resaltó el compromiso por parte de la DGI, responsable de la distribución del agua en Mendoza, de conocer el estado de sus acuíferos. “Debería ser replicado en
otras provincias porque generalmente son reservas hídricas únicas de las cuales disponen los gobiernos para todas las actividades, tales como consumo humano, producción e industria”, expresó.
La actividad de monitoreo de los niveles estáticos y muestreo de agua subterránea se llevará a cabo en dos campañas y tendrá un plazo de 24 meses para la entrega de resultados. El informe será un elemento a contribuir en la toma de decisiones del acuífero que tiende a ser una zona de explotación
sostenible en el largo plazo.