En el marco del convenio de la Administración Parques Nacionales y el Museo Argentino de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia, se inició en el Parque Nacional Quebrada del Condorito (provincia de Córdoba) un muestreo anual de insectos voladores por medio del uso de tres trampas Malaise instaladas en distintos ambientes del PN.

El muestreo se realiza de manera paralela en diversas áreas protegidas en el marco del proyecto “Códigos de barras genéticos de la entomofauna argentina mediante el empleo de trampas Malaise: construyendo una herramienta para la identificación, descubrimiento de especies y el monitoreo de la biodiversidad para su conservación”. Este sistema está diseñado para capturar insectos voladores y consiste en una malla de interceptación de vuelo, con un recipiente donde se almacenan en alcohol los insectos atrapados.

Este estudio forma parte de un proyecto internacional denominado iBOL (International Barcode of Life) con sede en Canadá, del cual Argentina participa desde hace 20 años a través del CONICET, y del estudio de distintos grupos de organismos, aportando valiosa información sobre las especies del territorio argentino. El objetivo es aportar a la construcción de una biblioteca de referencia mundial de las secuencias genéticas de todos los organismos eucariotas.

Todas las semanas y durante un año, personal del Departamento de Conservación y Manejo del Parque se encargará de recolectar las muestras provenientes de 3 trampas de insectos que fueron instaladas en distintos ambientes representativos del parque, para su posterior acondicionamiento en el Museo y envío de muestras a Canadá.

Por otra parte, el doctor Pablo Luis Tubaro, quien fue el Director del Museo Argentino Bernardino Rivadavia durante muchos años, y el doctor Dario Lijtmaer, ambos responsables de la investigación, brindaron una charla al personal de la Unidad y a guías de turismo del Parque para dar a conocer el proyecto y su importancia.