El Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat que conduce Jorge Ferraresi, sigue avanzando con la adhesión de las provincias al Programa de Planificación y Ordenamiento Territorial, y brindándoles asistencia técnica para la formulación y confección de instrumentos que les permitan mejorar sus capacidades de gestión territorial y sancionar legislaciones para conducir los procesos de urbanización.

De este modo y gracias al trabajo junto a la Secretaría de Desarrollo Territorial que encabeza Luciano Scatolini, La Rioja se convirtió en la primera provincia en sancionar una Ley de Desarrollo Territorial que le permitirá promover un hábitat adecuado y un uso del suelo socialmente justo, ambientalmente sostenible y económicamente equitativo, entendiéndolo como un recurso central para el desarrollo del territorio.

“La solución principal a los problemas de alquiler que tenemos en nuestro país sería lograr que los gobiernos sub nacionales puedan establecer mecanismos regulatorios para políticas urbanas, que empiecen a generar incentivos sobre la retención especulativa y la vivienda ociosa, entre otras medidas. Tenemos que generar múltiples acciones para mejorar las condiciones de vivienda en la oferta y que la demanda empiece a tener nuevas posibilidades, para cambiar la lógica de cómo crecen y se desarrollan las ciudades”, explicó Scatolini.

En tanto, el ministro Ferraresi destacó que “venimos realizando un trabajo muy coordinado junto a los gobiernos provinciales, con acciones concretas para transformar las ciudades inequitativas en nuestro país, planificando y ordenando el uso del suelo, contribuyendo al equilibrio territorial de las diferentes regiones y municipios, y proyectando la construcción de ciudades más justas”.

El Programa de Planificación y Ordenamiento Territorial busca promover procesos de planificación territorial integrales para las ciudades, sus periurbanos productivos y las áreas no urbanizadas con funciones ambientales y/o productivas, con foco en fortalecer las capacidades estatales de gestión del suelo. Entre sus objetivos incluye la movilización de vacíos urbanos ociosos, la creación del Registro Territorial de Suelo Apto para programas habitacionales, y la asistencia técnica para la formulación de instrumentos de Gestión de Suelo y Planificación Territorial.