El Ministerio de Salud invirtió más de 45 mil millones de pesos por la pandemia de COVID-19
Los fondos estuvieron destinados a incentivos para los trabajadores, transferencias a las jurisdicciones, obras, equipamiento, insumos y el fortalecimiento del sistema para dar respuesta a la situación provocado por el virus SARS-CoV-2.
En el reporte diario sobre COVID-19, el jefe de Gabinete de la cartera sanitaria nacional, Lisandro Bonelli, aseguró que durante la pandemia el Ministerio de Salud invirtió más de 45 mil millones de pesos y que se logró aumentar un 47 por ciento la capacidad del sistema en relación a las camas de terapia intensiva, pasando de 8.521 a 12.492.
“Por decisión del presidente de la Nación, Alberto Fernández, y del ministro de Salud, Ginés González García, se decidió darle prioridad a la salud en términos de partidas presupuestarias”, explicó y agregó que además se distribuyeron en todo el país 4.136 respiradores, 216 ecógrafos, 2.832 bombas de infusión y 2.356 monitores. También se enviaron 1.289 profesionales a las provincias para contribuir con la respuesta a la pandemia.
Con el fin de proteger a los trabajadores de la salud se distribuyeron 262.527 litros de alcohol, 345.002 antiparras y máscaras, 11.732.199 barbijos tricapa, 370.450 barbijos N95, 763.292 botas protectoras, 3.004.399 camisolines y mamelucos, 2.224.381 kits médicos, 613.204 litros de desinfectantes, 29.508.499 guantes y 12.709 termómetros.
En cuanto a los datos a nivel nacional, el subsecretario de Estrategias Sanitarias, Alejandro Costa, informó que son 1.498.160 los casos totales confirmados, 122.077 activos y 40.766 los fallecidos por lo que la tasa de letalidad promedio es 2,7 por ciento.
En la actualidad hay 3.537 personas internadas en terapia intensiva y 1.335.317 recuperadas, la cantidad de tests realizados por PCR son 4.259.194 y el porcentaje de positividad promedio es de 41 por ciento.
El porcentaje de ocupación general de camas de terapia intensiva en el país es de 54,5 % y el de AMBA es de 58,3 %.
Finalmente, el director de Enfermedades Transmisibles, Juan Manuel Castelli, comentó que a nivel mundial se están desarrollando distintos tipos de vacuna contra COVID-19 principalmente bajo cuatro plataformas o mecanismos “a través de los cuales se presenta al sistema inmune del organismo el virus o parte de él”.
Según Castelli, una de ellas son las vacunas con virus vivos inactivados o atenuados de modo que no se genera la enfermedad pero sí la respuesta inmunitaria. La segunda es una vacuna basada en proteínas en la que se utilizan fragmentos inocuos de estructuras proteicas que imitan al virus que causa COVID-19. Otra plataforma utiliza un virus distinto al SARS-CoV-2 genéticamente modificado. La cuarta opción “son vacunas en base ARN modificado para generar una proteína que origina una respuesta inmunitaria”.
Castelli indicó que existe amplia experiencia en plataformas de virus vivos atenuados o inactivados y las basadas en proteínas como las vacunas ya conocidas contra el sarampión, la varicela, la poliomielitis, la hepatitis A, o el virus del papiloma humano (VPH). “Las plataformas de vectores virales también son utilizadas en vacunas contra el virus del Ébola, el MERS, mientras que las plataformas de ácidos nucleicos, ARN mensajero y ADN son innovadoras y de desarrollo reciente”, detalló.