“Lo que no se ve, lo que no se toca y no se escucha en política, no existe, y hoy estamos inaugurando esta nueva sede”. Con estas palabras del ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, Martín Soria, se reinaugró la Delegación La Plata, donde se brinda atención sobre distintos trámites y gestiones registrales en el ámbito de la capital de la provincia de Buenos Aires.

En la delegación platense unos 120 trabajadores y trabajadoras atenderán 400 turnos presenciales diarios y 7000 por mes, para alcanzar una proyección de 200 mil turnos anuales, considerando los trámites gestionados de manera online en esta sede.

Allí se brindan servicios vinculados a diversas áreas del Ministerio nacional, como el Registro Nacional de Reincidencia; el Centro de recepción del Plan Nacional de Entrega Voluntaria de Armas de Fuego (PEVAF); una oficina de Derechos Humanos.

También el Registro Nacional de Derecho de Autor; Registro de la Propiedad del Automotor; Registro de Aspirantes a Guarda con Fines Adoptivos Registro de Tierras Rurales; asesoramiento legal gratuito a través los Centros de Acceso a la Justicia; y el Programa PatrocinAr. Además, la Delegación cuenta con un Punto Digital, iniciativa de la Jefatura de Gabinete de la Nación que brinda conectividad, capacitaciones, talleres y actividades culturales a personas de todas las edades.

Una sede que había sido abandonada

“El Estado está para resolver problemas y hoy Martin Soria está resolviendo un problema de los bonaerenses y también de muchos argentinos que tramitan en la ciudad de La Plata, temas que hacen a la administración pública”, dijo a su turno el ministro de Justicia bonaerense Julio Alak, también presente en la reinaguración.

“Con dos meses y medio pusimos otra vez esta delegación en valor y hoy la estamos reinaugurando para beneficio de todos los bonaerenses”, agregó Soria.

El edificio, ubicado en calle 13 de La Plata, fue inaugurado el 17 de octubre de 2015 por la actual vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner. Durante la gestión del gobierno anterior, las condiciones estructurales de la Delegación fueron empeorando persistentemente, debido al abandono y la falta de mantenimiento.

Una caída de granizo en el año 2017 agravó la situación edilicia: los arreglos provisorios cedieron y gran parte del techo colapsó a comienzos de 2019. La Delegación fue clausurada y debió relocalizarse en otro inmueble.