El INTA capacita a productores en procesos de deshidratación de frutas y hortalizas
Con el objetivo de mejorar las prácticas de manufactura en la conservación y deshidratado de frutas y hortalizas de temporada y generar valor agregado en la producción frutihortícola, el INTA La Rioja a través del trabajo conjunto entre las Agencias de extensión rural inició un ciclo de capacitación en secado solar destinado a productores, elaboradores, emprendedores y público en general. Participaron más de 40 asistentes, la mayoría emprendedores y productores locales de los Dptos. Chamical, Gral. Belgrano y Gral. Ocampo durante el mes de marzo.
Mediante el secado solar el producto conserva los valores naturales por un mayor periodo de tiempo y favorece el consumo de frutas y hortalizas en una época del año donde no se puede cosechar. Genera, además, un producto diferenciado en óptimas condiciones para poder comercializarlo en mercados locales.
El ciclo comenzó con la capacitación en la Escuela primaria de El Quebrachal, donde los Ing. Ricardo Lujan y Gabriela Vega del INTA AER Chamical expusieron en torno a las ventajas del secadero solar y pasos necesarios para su construcción. Participaron de la propuesta docentes, estudiantes y familias rurales.
La segunda capacitación estuvo coordinada por los Ing. Milena Garello Fogliatti, y Antonella Soria del INTA AER Milagro junto a los Ing. Leonardo Zarate y Carolina Cerezo del INTA AER El Portezuelo. La capacitación se realizó en el Centro primario de salud de Aguadita de Los Peralta (Dpto. Gral. Ocampo) donde participaron emprendedores locales y productores. Mientras que el Centro de día, ciudad de Olta, recibió a más de 20 asistentes que fueron los protagonistas de esta propuesta técnica, coordinada por la Ing. Carolina Cerezo del INTA AER El Portezuelo.
En cada instancia los profesionales compartieron como principales conceptos las alternativas técnicas para llevar adelante el proceso de disecado de hortalizas y frutas en una cama de pasas y la importancia de las buenas prácticas de manufactura para lograr un producto inocuo. Los participantes acondicionaron las frutas y hortalizas de estación y las colocaron en la cama pasera. Además, elaboraron dulce de hortalizas y salsa de tomate, entre otros productos.
La capacitación permitió que los asistentes dispongan de nuevas alternativas para optimizar el excedente de la producción de estación y conservarlo de manera segura reduciendo su volumen y mejoren la implementación de buenas prácticas de manufactura en el territorio, practicas fomentadas por el proyecto local 325 del INTA.
El ciclo de capacitación se extenderá durante los próximos meses según las demandas existentes.