El Inspector General de Justicia, Daniel Roque Vítolo, participó como invitado especial al acto de celebración del Día Internacional de la Empresa Familiar, que se celebra cada 5 de octubre.

Este año, el Instituto Argentino de la Empresa Familiar (IADEF), que preside Natalia Christensen, realizó el tradicional evento de reconocimiento a empresas familiares que han materializado un importante aporte a nuestra sociedad al obtener resultados extraordinarios dentro de su sector, por vía de la investigación, profesionalización, innovación y responsabilidad social.

En esta oportunidad, y ante un conjunto significativo de profesionales y emprendedores, se distinguieron las empresas familiares León Vidrios SRL, Reusch Argentina SRL, Juan Blangino SA, Losi y Cía. SRL, Las Tacuaras SA, Testorelli SA y Giesso.

Finalizado el acto, el Inspector General señaló la importancia y las virtudes que poseen las empresa familiares en la trama productiva de bienes y servicios en el país y en el mundo, como así también la relevancia de su participación en la actividad económica global, recordando que “La empresa privada ha sido el factor de desarrollo y cambio social más importante desde la Revolución Industrial hasta nuestros días. Pero, además de su participación principal en la producción de bienes y servicios para el mercado, las empresas familiares han aportado otros valores muy importantes a la cultura de la producción y el trabajo. A diferencia de muchas sociedades de capitales impersonales que buscan resultados inmediatos o a muy corto plazo, las empresas familiares piensan en generaciones, no en ejercicios contables. Este enfoque les permite adoptar decisiones estratégicas estables, preservar el nombre familiar y sostener políticas prudentes de crecimiento y reinversión. Las empresas familiares suelen tener valores profundamente arraigados, como la honestidad, el esfuerzo, la austeridad y la confianza mutua. Estos principios, transmitidos entre generaciones, configuran una cultura corporativa coherente y estable, que muchas veces se convierte en una ventaja competitiva difícil de replicar por terceros.”

“El trabajo conjunto de distintas generaciones favorece una transferencia continua de saberes, tanto técnicos como éticos y culturales. La experiencia de los fundadores se combina con la innovación de los más jóvenes, fortaleciendo la continuidad institucional. Y la labor del IADEF y del ILAEEF en apoyo a estos emprendimientos es de vital importancia para su desarrollo,” concluyó Vítolo.

La celebración del Día Internacional de la Empresa Familiar es una iniciativa global que surge desde la necesidad de concientizar a la sociedad en general y a todas las instituciones públicas y privadas, sobre la importancia de esta categoría de empresas para el desarrollo socioeconómico, político y cultural de cualquier país del mundo.

Datos estadísticos indican que tres de cada cuatro compañías en funcionamiento son gestionadas por familias. Además, las empresas familiares y sociedades denominadas “cerradas”, que no hacen oferta pública de sus acciones, generan el 70% de los puestos de trabajo de la actividad privada y un 95% del volumen de productos comercializados.