El equipo económico expuso los ejes centrales del Presupuesto 2021 ante la Comisión de Presupuesto y Hacienda del Senado
La Cámara alta comenzó a analizar el proyecto que ya tiene media sanción de Diputados.
Los secretarios de Política Económica, Haroldo Montagu; Hacienda, Raúl Rigo, y Finanzas, Diego Bastourre, expusieron esta tarde ante la Comisión de Presupuesto y Hacienda del Senado sobre los aspectos centrales del proyecto de Presupuesto 2021, que la semana pasada recibió media sanción en la Cámara de Diputados.
Al abrir las exposiciones, que se realizaron de manera virtual y se extendieron casi tres horas, Montagu afirmó que el objetivo del Presupuesto 2021 “es construir un puente entre la economía que tenemos y la visión de país que tiene el gobierno nacional de una Argentina inclusiva, federal, soberana, dinámica y con una macroeconomía estable. Este Presupuesto es un pilar fundamental para transportarnos a la economía que deseamos”, enfatizó.
Montagu sostuvo que el proyecto “pone el foco en la economía real. No habrá estabilización posible sin recuperación de la actividad y no habrá recuperación sin un Estado que acompañe y complemente al sector privado”, insistió.
El secretario de Política Económica también se refirió a los efectos económicos de la pandemia del Covid-19, un impacto que se suma a los desequilibrios que ya arrastraba la economía argentina a diciembre de 2019. En este sentido, resaltó que "el PBI registró en el segundo semestre una caída de 19,1% interanual. Para el cierre del 2020, creemos que la caída se recortaría a un 12,1%”, precisó.
En ese sentido, Montagu sostuvo que, tras el fuerte impacto inicial, “lentamente se ha ido recuperando el nivel de actividad. Luego de la caída del 25% en abril, hemos tenido variaciones y de a poco se va recortando la caída. En agosto estamos cerca del 10% por debajo de los niveles que se mostraba en febrero previo a la pandemia”, afirmó.
“La caída que hemos tenido en el segundo trimestre, que se va recortando con el transcurso de los meses, ha sido heterogénea, porque ha habido sectores que la sufrieron más que otros", explicó.
Asimismo, destacó que, a pesar del efecto negativo de la pandemia en la recaudación nacional, durante los meses de septiembre y octubre, “hemos experimentado una variación positiva en términos reales cercana al 5%”, lo que denota señales positivas asociadas a la tenue reactivación económica y a una sistemática desaceleración de los niveles de inflación.
A su turno, Raúl Rigo sostuvo que la iniciativa oficial “parte de objetivos realistas, prudentes y cumplibles, en el marco del escenario macroeconómico que se prevé para 2021”.
En esa línea, afirmó que “todas las políticas públicas que se proyectan tienen un financiamiento genuino”, y remarcó que el proyecto le da “un decidido impulso a la inversión pública para contribuir a la reactivación económica junto con el sector privado”.
En cuanto al déficit fiscal proyectado para 2021, del orden 4,5% del PIB, Rigo señaló que se trata de “un nivel posible de ser financiado. Mientras 2020 terminará con un déficit del orden del “6,6% ó 7%, el Presupuesto 2021 propone un déficit primario más acotado que vaya tendiendo hacia la convergencia fiscal y refleje un menor desequilibrio”, resaltó.
“El gasto real de 2021 va a crecer respecto 2020, sin tener en cuenta los gastos extraordinarios (por la emergencia). Para que exista esto y al mismo tiempo baje el déficit, vemos que el ajuste recaerá sobre los intereses de deuda producto de renegociación de la deuda pública”, destacó Rigo.
Además, indicó que "el gasto en infraestructura se va a duplicar, en términos de porcentaje del PIB, en 2021 con respecto al 2019. En 2019 fue del 1,1% del PIB y en 2021 será del 2,2%". "Esto es una clara apuesta a la reactivación y al rol activo del Estado a través de la obra pública", enfatizó.
A modo de cierre, Diego Bastourre se refirió a los lineamientos financieros que plantea el Presupuesto del año próximo, al tiempo que repasó los “hitos más destacados” que apuntaron a recomponer la sostenibilidad de la deuda pública, tanto en pesos como en dólares, desde que la actual administración tomó las riendas del gobierno nacional. “Las gestiones para regularizar la deuda nos dejan en una mejor posición y nos dan margen de maniobra”, dijo.
Por último, brindó detalles del alivio en la carga de intereses que significó el canje de deuda externa bajo legislación extranjera y legislación local, del orden de los u$s 42.000 millones para los próximos cinco años.
El proyecto de Presupuesto 2021 contempla un gasto total superior a $ 8 billones, estima un crecimiento de 5,5% del Producto Interno Bruto (PIB), un déficit fiscal de 4,5%, una inflación anual de 29% y un dólar en torno a los $ 102,4 para fin del año.