Presidencia de la Nación

Desandar el laberinto de la burocracia, clave para el desarrollo económico

 

 

Columna publicada el 01/07/2019 en El Economista.

Por Pedro Inchauspe (*)

La burocracia es un laberinto con peaje al que entramos a ciegas y en medio de la niebla. Nunca sabemos qué habrá detrás de la siguiente curva, nunca estamos seguros del sendero elegido. Mientras buscamos la salida, más nos perdemos y más peaje pagamos. Creemos avanzar pero, en cambio, siempre estamos volviendo frustrados al punto de partida. La burocracia vuelve complejo lo simple, coloca obstáculos donde debe haber caminos despejados, enturbia lo que debe ser transparente, encarece lo que puede ser barato y vuelve arbitrarias las normas que deben ser previsibles. La burocracia desalienta donde debería haber estímulos.

Al asumir el Gobierno, en diciembre de 2015, el presidente Mauricio Macri decidió impulsar, a través de la Secretaría de Simplificación del Ministerio de Producción y Trabajo, la desburocratización en todos los niveles del Estado eliminando normas innecesarias u obsoletas, reduciendo procesos e implementando iniciativas de gobierno abierto. Mediante un trabajo transversal y coordinado con diferentes ministerios y organismos, a lo largo de estos años avanzamos decididamente en la simplificación o eliminación de normativas y procesos burocráticos ineficientes. Estas fueron algunas de las medidas tomadas.
  • Implementamos el Régimen SAS, de Sociedad por Acciones Simplificadas, que permiten su creación en apenas 24 horas (antes demoraba hasta seis meses).
  • Creamos la Plataforma TAD, para Trámites a Distancia, que federaliza las gestiones, evitando presentaciones personales que solo podían hacerse en Buenos Aires.
  • Instrumentamos la Presentación Unica de Balances, que evita replicar trámites ante distintos organismos del Estado.
  • Eliminamos 17 Registros, entre ellos el Registro Industrial de la Nación, el Registro de Operaciones de Instrumentos de Medición, el Registro Nacional de Transparencia Comercial de Pepitas, el Registro de Contrato de Compra y Venta, el Registro de Importadores de Papa, el Sistema de Declaración Jurada de Movimientos. Otros 9 están en proceso de eliminación.
  • Creamos la Ventanilla Única de Comercio Exterior (VUCE).
  • Redujimos de importaciones por Canal Rojo aduanero del 60% al 18%, lo que implica menos costos de trámites de verificación y optimización de tiempos.
  • Simplificamos el Control de Abastos, generando un gran ahorro de tiempo y dinero para el sector transportista de alimentos.
  • Actualizamos Exporta Simple, una herramienta para simplificar trámites de exportación para pequeños productores. Esto permitió a más de 950 Pymes y emprendedores exportar a 103 países, los costos portuarios se redujeron 40%, se abrieron 170 mercados para productos agroindustriales y las exportaciones llevan 3 años de crecimiento sostenido.
  • Simplificamos el servicio internacional Puerta a Puerta vía postal, con un trámite digital que no requiere ir a retirar la compra a la Aduana.
  • Simplificamos los trámites para la exportación de obras de arte, permitiendo a nuestros artistas llevar sus creaciones al mundo.
  • Redujimos, en conjunto con numerosos municipios del país, los tiempos en la tramitación para habilitaciones comerciales mediante la presentación de declaraciones juradas y controles posteriores. Antes, dependiendo del municipio, habilitar un comercio podía demorar hasta 360 días, con más de 15 visitas a dependencias públicas y la presentación de más de 20 documentos.
  • Implementamos la Factura de Crédito Electrónica, una herramienta que les permite a las Pymes mejorar sus condiciones de financiación mediante el cobro anticipado de los créditos y de los documentos por cobrar emitidos por sus clientes.
En busca de mayor transparencia en la gestión de trámites, este año implementamos también el Tablero de Gestión, una herramienta digital que permite buscar un trámite y localizarlo según la dependencia en la que se encuentre. Se visualiza el tiempo de tramitación y se pueden conocer las metas de cada dependencia, cantidad de expedientes procesados y tiempos de resolución.
Además, la iniciativa #HaceloSimple permite a los ciudadanos opinar sobre aquellos proyectos que entrarán en vigencia en los siguientes 60 días. También pueden denunciar trámites, normas o regulaciones que como traba burocrática afecten el desarrollo de una actividad del sector productivo, mediante la herramienta #DenunciáTuBurocracia.
Revertir la burocracia implica desandar los caminos torcidos de su laberinto. Lleva tiempo, implica revisar leyes, afectar privilegios. Vale la pena. Sólo con normas claras, simples, no arbitrarias ni recaudatorias, el Estado cumple con su función sin afectar libertades ni desalentar oportunidades. Condiciones indispensables para el deseado desarrollo.
 
 
(*) Secretario de Simplificación Productiva del Ministerio de Producción y Trabajo de la Nación
 
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