En primer lugar, la sección núcleo del escuadrón 57 de la Gendarmería Nacional desplegaron puestos de control sobre el kilómetro 669 de la Ruta Nacional Nº 14, lugar conocido como Cuay Grande. Allí, los oficiales intentaron detener la marcha de una camioneta pero esta hizo caso omiso a las mismas.

Inmediatamente, se realizó un seguimiento del rodado, que -con la asistencia de la Policía correntina- fue encontrado abandonado en una zona conocida como Pancho Cue, cercana al río Aguapey.

Los funcionarios detectaron en la parte trasera de la camioneta una gran cantidad de bultos con cientos de paquetes rectangulares en su interior. La Fiscalía Federal de Paso de los Libres ordenó que se trasladara el vehículo a la sección Alvear, donde en presencia de testigos hábiles se realizó la apertura de las cajas: 775,488 kilogramos de marihuana fraccionados en 1.041 ladrillos.

Por otro lado, los efectivos de la Gendarmería Nacional, llevaron a cabo importantes tareas de inteligencia criminal y desplegaron un procedimiento de cerrojo y control sobre un punto estratégico en el kilómetro 1.144 de la Ruta Nacional N° 11, donde, a partir de lo recolectado durante la pesquisa, pasaría el vehículo investigado, que estaría trasladando estupefacientes.

A las pocas horas de ubicar el puesto de control, los gendarmes interrumpieron la marcha de una camioneta que coincidía con el vehículo en cuestión. Al llevar a cabo la inspección  del rodado, los funcionarios de la fuerza detectaron tornillos sueltos en la alfombra del piso, que al levantarla dejo a la vista gran cantidad de paquetes rectangulares envueltos en cinta color ocre y rojo: 200,250 kilogramos de marihuana dividida en 244 ladrillos de diferentes tamaños.

En total, combinando ambos operativos, dejaron 975,738 kilos de marihuana fuera de circulación y dieron un paso más hacia el objetivo: una Argentina Sin Narcotráfico.