Los Parques Nacionales Los Glaciares y Perito Moreno (Santa Cruz), Los Alerces y Lago Puelo (Chubut) y Lanín (Neuquén) festejan hoy en simultáneo el 84° aniversario des su creación como espacios protegidos a través de un decreto que estableció la protección de estas áreas andino-patagónicas que en conjunto suman más de un millón y medio de hectáreas.

La fecha conmemora la firma del Decreto Nº 105.433, por el cual a partir del 11 de mayo de 1937 el Estado nacional declaró como Reservas con destino a convertirse en parques nacionales a estas áreas patagónicas proyectadas hasta la frontera con Chile, en territorios que en aquellos tiempos resultaban lejanos e inaccesibles, al oeste de las provincias de Neuquén, Chubut y Santa Cruz.

Estos extensos bosques nativos albergan grandes reservas de agua dulce y son un componente esencial de los frágiles ecosistemas que los contienen; además de beneficiar a cientos de actividades económicas vinculadas a la calidad de este recurso vital.

A partir del desarrollo turístico generado durante los últimos cincuenta años en las regiones vinculadas a estos parques, las localidades cercanas se fueron transformando en reconocidos centros de servicios que hoy motorizan las economías locales.

La ecorregión Bosques Patagónicos es una delgada franja boscosa que se extiende desde el norte de Neuquén hasta Tierra del Fuego y la Isla de los Estados. También se los llama Bosques Subantárticos y, entre otras particularidades, albergan una abundante cantidad de especies exclusivas, tales como el huemul y el pudú, dos ciervos emblemáticos que transitan los bosques de los Andes australes.