Presidencia de la Nación

Ceremonia de entrega de espadas y jura a la Bandera en Puerto Belgrano

Suboficiales superiores recibieron sus distintivos de mando y marineros juraron fidelidad a la bandera. También se recordó el 245º aniversario del nacimiento del Almirante Guillermo Brown.


Puerto Belgrano – Esta mañana, en el Estadio de Deportes de la Base Naval Puerto Belgrano, se llevó adelante la ceremonia conmemorativa del 202º aniversario del fallecimiento del creador de la bandera, General Manuel Belgrano. Además, fue el marco para la entrega de espadas a los suboficiales superiores recientemente ascendidos y la jura de lealtad al emblema nacional por parte de marineros.

En dicho marco y con ocasión de la fecha, se recordó el 245º aniversario del nacimiento del Almirante Guillermo Brown, acontecido el 22 de junio de 1777.

La ceremonia tuvo su inicio con el ingreso al predio del Comandante de Adiestramiento y Alistamiento de la Armada, Contraalmirante Juan Carlos Daniel Abbondanza, quien presidió la ceremonia, acompañado del Jefe de la Base Naval Puerto Belgrano, Comodoro de Marina Martín Laborda Molteni.

Estuvieron presentes el Comandante de la Flota de Mar, Contraalmirante Carlos María Allievi; el Comandante de la Infantería de Marina, Comodoro de Marina IM Fernando Daniel Terribile; y el Comandante de la Aviación Naval, Comodoro de Marina Juan Alberto Mercatelli. También asistieron oficiales superiores; personal militar y civil; y familiares.

La incorporación de la Bandera de Guerra del Comando de Adiestramiento y Alistamiento dio paso al Himno Nacional Argentino, ejecutado por la Banda de Música de la Base Naval Puerto Belgrano.

Acto seguido, el Comandante Naval Anfibio y Logístico, Capitán de Navío Eduardo Adrián Mayol, pronunció palabras alusivas: “Un 22 de junio como hoy, pero hace ya 245 años, nacía en Irlanda, Guillermo Brown, marino llamado a convertirse en el indiscutido prócer naval de Argentina y Comandante de la invencible escuadra que permitió dar por finalizadas las aspiraciones de dominación realista en el Río de la Plata. Su victoria alejó para siempre las amenazas que se cernían sobre la causa de la independencia argentina. Reconocido como el padre de la Patria en el mar, rememorarlo hoy significa rendir el merecido homenaje al héroe de múltiples batallas navales, al estratega incansable e iluminado, y al tenaz constructor de la incipiente Nación”, inició.

“Conmemorar hoy su nacimiento, en el marco de esta formación, con la presencia protagónica de los recientemente ascendidos suboficiales que recibirán la espada de mando es más que un trascendente privilegio, por ello los invito a reflexionar sobre el mando, ese don innato que para nuestro Almirante fue el pilar de sus hazañas”, destacó el Capitán Mayol.

Para el cierre, dedicó palabras a los suboficiales que recibirían espadas. «Hoy recibirán la espada de mando, símbolo y atributo que, de forma implícita y explícita, significa más cúmulo de responsabilidades que privilegios, más deberes que derechos. Formarán, una vez que la reciban, parte de la toma de decisiones y conducción de los hombres y mujeres a sus órdenes, proyectando los valores y convicciones más sublimes a los que un marino puede aspirar. Deberán ser siempre gente de bien, listos a asumir con decisión, humildad y plena responsabilidad la carga que su grado y jerarquía demandan para el bien del servicio en la Armada”, prosiguió.

Una vez finalizado el discurso, el capellán castrense Pablo Daniel Caballero Karanik estuvo a cargo de la invocación religiosa y la bendición de las espadas. Consecutivo, y tras la lectura de la orden transitoria, se efectuó la entrega de las mismas a los suboficiales.

Luego de la entrega, el Comandante de la Infantería de Marina dedicó palabras y tomó juramento a los Marineros Tropa Voluntaria. Así, el “Sí, juro” de cada uno de los jóvenes selló el compromiso de defender con la propia vida la Bandera Nacional.

“Hoy es un día especial para los nuevos integrantes de la Armada Argentina, donde los Marineros Tropa Voluntaria darán testimonio de fidelidad a nuestra Patria a través de un acto solemne y trascendental en la vida de un militar: la jura de la Bandera», expresó.

«Vuestro juramento será un acto pleno de valores que aúna compromiso, tradición y simbolismo: compromiso con la Patria, para dar fe de la lealtad que le juran; tradición, porque se convierten en herederos y participes de la gloriosa historia de una Nación escrita por quienes, como ustedes hoy, juraron la bandera y cumplieron hasta las últimas consecuencias el juramento empeñado; y simbolismo, porque juran una Bandera Argentina tejida con hilos que representan los anhelos y esfuerzos de vuestros compatriotas que han depositados en vosotros su confianza para cumplir con el deber de servir a la Patria”, pronunció el Comodoro de Marina IM Terribile.

La ceremonia concluyó con la reincorporación de la Bandera de Guerra a su lugar de formación; se entonaron las estrofas de las Marchas de Malvinas y de la Armada; y la adopción del dispositivo de desfile que cerró el acto con los movimientos militares de los marineros y la Agrupación “20 de Junio”.

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