Durante la jornada de hoy el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación (MAyDS), Juan Cabandié, realizó una recorrida presencial junto a especialistas y técnicos para establecer un cronograma de trabajo enfocado en las reformas y arreglos que requiere este emblemático edificio, sede histórica de la Administración de Parques Nacionales (APN).

Durante su visita, Cabandié destacó: “La puesta en valor del Palacio Haedo es una deuda pendiente desde hace muchos años, y en el contexto de la Reconstrucción que estamos llevando adelante desde el gobierno nacional, vamos a trabajar para que pueda volver a abrir sus puertas, y que los visitantes puedan tener una primera aproximación a los Parques Nacionales en este histórico edificio”.

Juan Cabandié estuvo acompañado por el secretario de Obras Públicas de la Nación, Martín Gill; la jefa de Gabinete del MAyDS, Soledad Cantero; el presidente de la APN, Lautaro Erratchú, y por la vicepresidenta del Organismo, Natalia Jauri; junto a un equipo de técnicos que trabajan en la evaluación del proyecto de restauración y puesta en valor del inmueble.

“Después de muchos años y gracias al trabajo conjunto con el Ministerio de Obras Públicas, avanzaremos en su puesta en valor, y será convertido en un Centro de Interpretación de alta tecnología para incentivar la llegada de visitantes a los Parques Nacionales de todo el país” señaló Cabandié.

Actualmente, la Sede Central de la Administración de Parques Nacionales se ubica en la calle Pellegrini 657, frente al Teatro Colón, en un edificio corporativo destinado a la renta al que se decidió mudar las oficinas en el año 2017, asumiendo un alto costo de alquiler mensual.

El Palacio Haedo, catalogado por la Comisión Nacional de Monumentos, está ubicado frente a la Plaza San Martín de la ciudad de Buenos Aires, en el barrio de Retiro, y fue construido originalmente en 1870, como vivienda para la familia. En 1881 Reynaldo Villar compró el edificio que luego heredarían Dominga Villar y Cristina Manuela Villar de Del Viso.

En 1942, a través de un decreto originado en el Ministerio de Agricultura, el Estado nacional aprobó el boleto de compraventa del inmueble firmado por Parques Nacionales y el Banco Popular Argentino, y comenzó la remodelación del edificio para su nueva función. El proyecto estuvo a cargo de los arquitectos Passeroni y Brizuela, y la obra fue realizada por la constructora Schiappapietra y Hermanos.