El sábado 18 de diciembre la Sala Argentina del Centro Cultural Kirchner fue escenario del concierto de la orquesta conformada por los y las jóvenes instrumentistas que participan en las Becas de formación y perfeccionamiento “Martha Argerich”. En la sala estuvieron presentes el ministro de Cultura de la Nación, Tristán Bauer, el director Nacional de Diversidad y Cultura Comunitaria de la Secretaría de Gestión Cultural, Juan Esteban Buono Repetto, y el coordinador de los programas de Cultura Popular y de Orquestas Infantiles y Juveniles, Rolando Goldman.

Previo al concierto, Bauer y Buono Repetto procedieron a la entrega de certificados a los becarios y becarias; jóvenes de todo el país de entre de entre 18 y 26 años, que integran las orquestas “Andrés Chazarreta” y “Celia Torrá”, vinculadas al Programa Social de Orquestas infantiles y juveniles del Ministerio.

Sobre el programa de orquestas y las Becas Martha Argerich, el ministro Bauer expresó: “Para mí este es uno de los proyectos más hermosos que tiene nuestro ministerio. Primero porque estas orquestas están a lo largo y ancho del país, luego porque están compuestas por jóvenes. Jóvenes que con una pasión amorosa se vinculan con sus instrumentos, estudian y se forman para integrar estas orquestas. Nuestro agradecimiento inmenso a Martha Argerich, madrina de esta beca, y a todos los maestros que los acompañaron y los están acompañando. La música es algo fundamental en la existencia humana. Por eso nuestro compromiso para seguir acompañando con todas nuestras fuerzas este programa para que crezca cada vez más, porque sabemos de su importancia para nuestra cultura y nuestra vida como nación”.

Por su parte Rolando Goldman destacó el trabajo de los docentes Laura Beltramini y Néstor Viloria a cargo de los programas de orquestas “Andrés Chazarreta” y “Celia Torrá”, respectivamente, y contó que: “Esta misma semana fueron creadas diez nuevas orquestas que se suman en Jujuy, Salta, Chaco, Córdoba, La Pampa, de Neuquén. Estas diez orquestas tienen un vínculo en el trabajo cotidiano que va a significar la creación de una orquesta que va a contar con el acompañamiento de organizaciones y movimientos sociales”. Y agregó: “Hay diversos municipios, en particular de la Provincia de Buenos Aires, que se han acercado con la idea de sumarse a la tarea de creación de orquestas. Si no es en enero, en febrero calculamos que va a haber nuevas orquestas en Ensenada, Hurlingham y Lomas de Zamora”.

El concierto, en el que se interpretaron obras como Decarisimo, de Astor Piazzola,el joropo El Gaban, el candombe Mestizo, la Chacarera del tiempo y una selección de cumbias colombianas, contó con la dirección del maestro Carlos “Zurdo” Álvarez y la participación especial de la cantante cuyana Mónica Abraham.

Como cierre de un año marcado por las restricciones de la pandemia los y las participantes de la beca compartieron por primera vez instancias presenciales de trabajo conjunto durante las dos jornadas previas al concierto. En distintos espacios del Centro Cultural Kirchner tuvieron, a lo largo del jueves 16 y el viernes 17, una intensa agendas de actividades que incluyó: ensayos simultáneos por fila, por sección y generales, una charla con el director de orquesta, Mariano Chiacchiarini, una visita al ensayo y concierto que ofreció la Orquesta Sinfónica Nacional en Tecnópolis, un taller sobre el método Feldenkrais para músicos y músicas con el fin de concientizar sobre el cuidado del cuerpo y las articulaciones como parte de la profesión, y un recorrido por el centro histórico de la ciudad de Buenos Aires.

Sobre las Becas Martha Argerich

Las Becas Martha Argerich tienen como objetivo fundamental la formación de futuros docentes de instrumentos. El plan de contenidos diseñado para 34 jóvenes músicos y músicas vinculados al Programa Social de Orquestas Infantiles y Juveniles, se propone brindar las herramientas pedagógicas para que puedan enseñar a las nuevas generaciones de sus actuales orquestas y de las que vendrán. Quienes han accedido a la beca, como parte de su formación en la práctica, integran una nueva orquesta de jóvenes becarios y becarias. En este sentido, el encuentro presencial se torna un espacio fundamental que permitirá el desarrollo pleno del trabajo que se viene realizando –apoyado en diversidad de recursos tecnológicos- desde el espacio de práctica orquestal.

Esta experiencia inédita en la historia de los Programas de Orquestas Infantiles y Juveniles, les ha permitido acceder –desde julio a esta parte- a capacitaciones en diversas disciplinas, desarrolladas en formato virtual para favorecer la participación desde todos los rincones del país. Asimismo, docentes especializados/as han dictado sus clases también desde distintos puntos de la Argentina, ratificando el carácter auténticamente federal propuesto para las becas. Las temáticas comprendieron: Técnica especializada en el instrumento, técnica vocal y canto, didáctica y formación docente, herramientas digitales para la educación musical, práctica orquestal, análisis de arreglos y edición de partituras. Para 2022, se proyecta profundizar en los mismos contenidos abordados en este semestre e incorporar aquellos relacionados al análisis de las orquestas infantiles y juveniles como política cultural, a la apreciación y características distintivas en la interpretación de la música argentina y latinoamericana de raíz folklórica, a la composición y desarrollo de la creatividad, y a los basamentos de la educación popular y economía popular para el futuro desempeño profesional.

La gran artista argentina, Martha Argerich, tuvo la generosidad de brindar su apoyo y su interés para ser la madrina de las Orquestas del Programa Social del Ministerio de Cultura de la Nación, a partir de su propia historia y experiencia en la que el Estado argentino tuvo un rol determinante para impulsar su propia formación y su carrera posterior.

Del mismo modo, las presentes becas se proponen reconocer la experiencia acumulada por jóvenes que, al haber participado desde niños/as de un proyecto cultural, como son las orquestas de los barrios populares, han podido vivir la gran experiencia de participar en proyectos culturales artísticos, grupales, inclusivos, no competitivos, e igualadores. Revalorizando, además, los años de estudio y práctica de uno o más instrumentos.