23 de marzo: Día Meteorológico Mundial
En la Armada Argentina resulta fundamental contar un servicio meteorológico porque colabora con la planificación de las operaciones navales en los distintos espacios de tierra, mar y aire.
Cada 23 de marzo se celebra el Día Meteorológico Mundial, por ser la fecha en que se creó la Organización Mundial de la Meteorología (OMM) en Ginebra, Suiza. Es una entidad que pertenece a las Naciones Unidas y se fundó en 1950 con el objetivo de trabajar mancomunadamente en el estudio y el cuidado del clima, los ciclos del agua y la concientización de la población mundial en la importancia y preservación del medio ambiente.
Este organismo está conformado por 192 Estados, y realiza investigaciones sobre contaminación del aire, cambio climático, daños que se producen en la capa de ozono y la predicción de tormentas tropicales. Además, tiene la responsabilidad de distribuir toda la información analizada e investigada con rapidez y precisión al público en general y a los sistemas de navegación aérea y marítima.
Desde 1951 nuestro país integra la OMM como muestra de que la cooperación internacional es necesaria e importante en los estudios de meteorología e hidrología.
El Servicio Meteorológico en la Armada
En 1947 la Armada Argentina formó su propio Servicio Meteorológico para poder realizar pronósticos específicos de las actividades operativas realizadas por las unidades de superficie, la Fuerza de Submarinos, la Infantería de Marina y la Aviación Naval. El conocimiento de las variaciones climáticas es de suma importancia para el desarrollo de la navegación, las operaciones militares y la vida en general.
En la actualidad, el Servicio Meteorológico está compuesto por oficiales y suboficiales que realizan un seguimiento permanente de las actividades de la Armada y la evolución de pronósticos; un trabajo que se realiza en guardias de 24 horas en las áreas centrales de Buenos Aires y las bases aeronavales Almirante Espora y Río Grande.
En tanto, las unidades de asesoramiento se encuentran en las bases aeronavales de Punta Indio, Almirante Zar y en las Áreas Navales Atlántica y Austral; y son las encargadas de realizar seguimiento y apoyo de investigación en el resto de las zonas geográficas.
Los datos analizados y estudiados en el área de investigación y desarrollo, en Buenos Aires, son fundamentales para el trabajo a bordo de buques tales como el rompehielos ARA “Almirante Irízar” y los oceanográficos ARA “Puerto Deseado” y ARA “Austral”, entre otras unidades.
El Servicio Meteorológico de la Armada Argentina garantiza una cobertura eficiente y total en todas las áreas de responsabilidad, mediante el trabajo mancomunado y comprometido de su personal especializado.
El pronóstico en navegación
En toda navegación embarca un equipo de meteorólogos que recibe los pronósticos desde las centrales en tierra. Se les envían cartas meteorológicas para que analicen y, mediante conexión a internet satelital, pueden descargar las salidas de los modelos numéricos del tiempo; lo que sumado al instrumental a bordo les permite contar con la información necesaria para generar pronósticos meteorológicos.
También se suman receptores de imágenes satelitales que permiten tener una visión mucho más amplia de cómo son las condiciones en todas las grandes áreas de desplazamiento de los sistemas meteorológicos.
En largas navegaciones, como son los Viajes de Instrucción de la fragata ARA “Libertad”, el equipo de profesionales se ocupa de elaborar sus pronósticos a medida que va recorriendo los distintos puertos internacionales. El personal consulta la información de los servicios meteorológicos del mundo; en tanto la central de Buenos Aires le brinda asistencia durante todo el viaje mediante archivos y cartas meteorológicas.
Otro caso son las Campañas Antárticas de Verano, durante las que la central de Río Grande envía los pronósticos a las áreas de operaciones donde se encuentran trabajando los meteorólogos. Por su parte, el personal embarcado utiliza las herramientas con las que cuenta a bordo del buque para complementar el material recibido; además se integra la información glaciológica que se envía desde Buenos Aires para poder analizar el estado de la atmósfera y hielos.
En la Armada Argentina resulta fundamental contar un servicio meteorológico porque colabora con la planificación de las operaciones navales en los distintos espacios de tierra, mar y aire. La ejecución de las actividades operativas depende en gran medida del trabajo que realizan los hombres y mujeres navales especializados en la temática.