Mediante los espectrómetros de Fluorescencia de Rayos X por reflexión total (TXRF) se puede determinar la presencia de elementos trazas y ultratrazas en matrices líquidas y sólidas. En la CNEA poseemos una vasta experiencia aplicando esta metodología a problemáticas relacionadas con la industria apícola, determinando los contaminantes que pueden estar presentes en miel.

La aplicación al resto del sector alimenticio es directa, ya que permite determinar la presencia de estos elementos tanto en productos finales como en productos de proceso o materias primas. El Codex de Productos Químicos Alimentarios y la reglamentación europea estipulan límites de residuos para estos elementos en productos alimentarios, por lo que este análisis es fundamental si se quiere cumplir con la regulación interna o ingresar a los mercados internacionales.