El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) desarrolló directrices para ayudar a los departamentos de medicina nuclear a adaptar los procedimientos operativos para minimizar el riesgo de infecciones por COVID-19 entre los pacientes, el personal de salud y el público. Las directrices también consideran la posible escasez de radiofármacos esenciales para la obtención de imágenes, debido a las restricciones mundiales del tráfico aéreo.

Publicado en el European Journal of Nuclear Medicine and Molecular Imaging, el documento hace recomendaciones basadas en el recorrido típico de un paciente a través de un departamento de medicina nuclear. Cada año se realizan más de 30 millones de estudios de imágenes en todo el mundo para diagnosticar pacientes con cáncer, enfermedades cardiovasculares o demencia, entre otras afecciones de salud.

Las directrices se elaboraron en respuesta a solicitudes de los departamentos de medicina nuclear de varios Estados Miembros del OIEA. Se basan en una revisión de la literatura disponible, así como en las contribuciones de un panel de expertos internacionales y los resultados de un seminario online organizado por el OIEA titulado “Pandemia de la enfermedad por coronavirus (COVID-19): desafíos para los departamentos de medicina nuclear”. El Organismo también desarrolló otros seminarios online en las últimas semanas para discutir los desafíos que enfrentan los departamentos de medicina nuclear y radioterapia y para compartir las mejores prácticas durante esta pandemia, accesibles aquí.

Las directrices también advierten sobre posibles alteraciones en el suministro de radioisótopos, como el radioyodo y el molibdeno-tecnecio, debido a las restricciones mundiales del transporte aéreo. Aconsejan mantener inventarios detallados, así como listar todos los posibles proveedores y canales de distribución.

Sobre la base de la orientación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para los servicios esenciales de salud durante esta pandemia, el documento del OIEA abarca medidas tales como la capacitación para el reconocimiento de COVID-19 en pacientes y en el personal de salud, el uso estricto de equipos de protección personal (EPP), el distanciamiento físico, el uso de tecnologías de comunicación en la discusión de casos y hallazgos, el lavado de manos y las medidas de higiene respiratoria, y la limpieza y desinfección de equipos y accesorios. También detalla cómo deben proceder los profesionales de la medicina nuclear si durante los procedimientos, como un PET/CT para la evaluación del cáncer, los hallazgos muestran patrones consistentes con una posible infección de COVID-19.

Acceda a la guía en idioma inglés aquí.

También dispone de una traducción al español realizada por el Departamento de Medicina Nuclear de la ARN, que puede descargar abajo.
Abril 2020

En julio 2020, el OIEA publicó una guía técnica con recomendaciones para los servicios de medicina nuclear. Podes acceder aquí.